¿Literatura?

   La literatura no es un bicho raro sino una vieja conocida. El arte del lenguaje verbal existe desde siempre, pues desde siempre sirvió para contar historias o expresar sentimientos individuales o colectivos. Incluso cuando aún no existía la posibilidad de escribir los textos y la única forma de conservarlos era la memoria. 
   La literatura forma parte de la cultura y durante siglos ha sido considerada una de las expresiones artísticas más importantes del ser humano. Además, los textos escritos e impresos fueron durante siglos el único medio de conservar y transmitir el conocimiento. De ahí que muchos textos literarios hayan sido considerados "sagrados" (como varios de los textos bíblicos). Al ser una de las artes más antiguas y contar con multitud de testimonios (la mayoría escritos, claro) el estudio de su historia ha sido muy valorado culturalmente, estableciéndose periodos, épocas, movimientos, distinciones entre las literaturas nacionales...
   Debemos entender, pues, que la literatura es un fenómeno muy amplio y no lo que hicieron hace mucho tiempo señores serios y aburridos como estos:

Anton Chejov y Lev Tolstoi
    Tampoco es cosa de hombres ni de viejos ni de ricos. Y está en todas partes, no solo en inmensas estanterías de librerías y bibliotecas (que también). Y, si no, echad un vistazo a algunos enlaces de la columna derecha. En definitiva, hay literatura para todos los gustos y todo el mundo puede disfrutar de las mejores obras literarias: breves, antiguas, originales, actuales, transgresoras, clásicas, conocidas...

   Un análisis completo

  •    Como fenómeno estético consiste en el uso artístico del lenguaje verbal. Allí donde hay creatividad a partir de las palabras hay literatura, incluso en el teatro, las canciones o los guiones de cine y televisión, ya que estos últimos reúnen materiales audiovisuales.
  •    Como fenómeno comunicativo responde siempre a una intención expresiva de los autores y no completa su sentido hasta que las obras son recibidas (leídas o escuchadas) por alguien, quienes son habitualmente designados como público (lectores o espectadores).
  •    Como fenómeno social está en relación con el entorno y las circunstancias en las que se componen sus obras (época, mentalidad, filosofía, política...) Pero también con el entorno y las circunstancias en las que se difunden, ya sea de forma contemporánea al autor o tiempo (a veces mucho tiempo) después.

   La ficción

   Actualmente se considera que, además del uso artístico de la lengua, los textos literarios tienen otro componente fundamental: la ficción. No siempre fue así, pues se entendía que entre las obras y la realidad había una relación necesaria, entendida como verdad. La palabra ficción nos permite entender esa relación de otra manera: los autores y los textos fingen situaciones, emociones y expresiones para conmover, sorprender o emocionar al lector. El lector, a su vez, finge entender esas situaciones, etc., como si fueran reales, sin importar que se parezcan más o menos a la realidad. El grado del parecido es más bien cuestión de estilos y épocas. Se entiende mejor la idea en este poema de Fernando Pessoa, sin duda el más agudo y probablemente el mayor de todos los poetas:
AUTOPSICOGRAFÍA
El poeta es un fingidor.
Finge tan completamente
que incluso finge el dolor
cuando de veras lo siente.

Y quienes leen allí escrito
ese dolor ya no sienten
los dos que él ha tenido
sino los que ellos no tienen.

Y así, incrustado en la vía,
despistando a la razón,
gira ese lento tranvía
que se llama corazón.

(Traducción del portugués: Salvador Calderón de Anta)

   ¿Hay palabras literarias?

   Si la Literatura se basa en el uso artístico del lenguaje verbal, cualquier palabra o expresión es susceptible de formar parte de un texto literario. Las palabras cultas o las raras no son más literarias que las corrientes, incluso a veces aparecen palabras inventadas:  
   Apenas él le amalaba el noema, a ella se le agolpaba el clémiso y caían en hidromurias, en salvajes ambonios, en sustalos exasperantes. Cada vez que él procuraba relamar las incopelusas, se enredaba en un grimado quejumbroso y tenía que envulsionarse de cara al nóvalo, sintiendo cómo poco a poco las arnillas se espejunaban, se iban apeltronando, reduplimiendo, hasta quedar tendido como el trimalciato de ergomanina al que se le han dejado caer unas fílulas de cariaconcia. (Julio Cortázar, Rayuela)
   Tampoco las oraciones largas, complejas o difíciles de entender son más literarias que otras. ¿De qué depende entonces que un texto sea literario? Básicamente de que el uso de la lengua tenga una intención artística, es decir, que no pretenda comunicar algo sino transmitir sensaciones o emociones, conmover al lector o al público y llamar su atención.